Voy a jugar con tu pelo, enredándolos en mis dedos,
voy a despertar tus ansias,
quiero
besarte los ojos , quiero beber de tus lágrimas...
Mi
boca en tu boca... Quiero besarte con calma,
mordiendo tus
sentimientos, quiero robarte el alma.
por perderme en tu
abrazo y luego dormirme en tu pecho,
y sembrar mis ganas.
Haremos el amor bajo la sombra del alba.
Voy amarrar tu pasión para que nunca se pierda en la distancia,
me deleitaré bajo la luna de nácar,
me embriagaré con
tus aromas y el sol nos encontrará desnudos,
sobre la
playa.
¡Las olas serán testigo del amor que no acaba!
Evocas en mi, sentimientos, que hacen que pierda la batalla,
yo ante tus ojos, soy esclavo de tu mirada.
Renaces de lo más
profundo de mi alma,
marcando mi cuerpo, con huellas de una lujuria
desatada.
Tus besos me provocan alegrías, que no acaban al alba,
como no quererte si eres lo que tanto buscaba,
ese rayo
dorado que ilumina mi alma,
esa luna caprichosa, que se desnuda para
envolvernos con su magia,
¡como no amarte, si me endulzas las entrañas!
Haciendo de mi una hoguera, cuando la leña, se transforma en palabras,
como las cenizas caen, desplegándose ante las miradas.
Como no mirarte, si mis locuras ya no tienen escapadas.
Amo
tanto, que me duele el alma,
duelen con heridas de pasión, que en mi
piel, quedaron marcadas.
José Manuel Sirgo Gallardo.
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